Ponencia "Del Pasillo al Baile Bravo" por Argiro Ochoa
- Corporación Cultural Hojarasca
- 13 feb 2021
- 19 Min. de lectura
Actualizado: 19 feb 2021

Reconocimiento del Consejo de Danza del municipio de Bello, Antioquia, entregado por Argiro Ochoa en el Festival del Baile Bravo 2005 a Carlos Tapias Londoño.
Quiero hacerle un homenaje a mi compañero, amigo y colega Argiro Ochoa a quien conocí en el año 1964 siendo yo bailarín del grupo IPC y él director musical del conjunto Los Arrieros, grupo acompañante del Grupo de baile dirigido por los hermanos Marta y Jairo Herrón, donde este último era el coreógrafo. Pienso que a partir de esa experiencia es que Argiro empieza a interesarse por las danzas folclóricas.
Los cultores de la danza folclórica de Antioquia no hemos valorado la magnitud de la obra de Argiro que le dio identidad a la danza paisa; por eso quiero dar a conocer la transcripción de la sustentación musical del Baile Bravo, realizado en el auditorio de la Casa de la Cultura del Cerro del Ángel en Bello Antioquia, el 12 de julio de 1998 y que fue expuesta posteriormente por él, en el Festival del Pasillo en Aguadas, Caldas 2009.
El análisis musical que hace Argiro del ritmo que interpretaban los músicos campesinos antioqueños, para acompañar las diversas melodías de los bailes de la época, lo lleva a varias conclusiones que se suman a los aportes que ya ha hecho a la danza antioqueña; caracterizándola con la idiosincrasia de la cultura paisa.
No quiero suprimir ninguna parte de la transcripción, aunque a veces hay repeticiones; pero esas mismas repeticiones son, digo yo, la metodología empírica, pero sabia, que hace que los legos en música, los que no sabemos ni pío, podamos entender la diferencia entre “Pasillo” y “Baile bravo” como ritmos “hermanados” y reconocer que “ritmos” de la música parrandera son “Baile bravo”. Porque lo de Baile Bravo es fácil de entenderlo bien sea porque se ha tenido la oportunidad de participar en una fiesta en el campo o bien porque le ha tocado ensayar con un profesor que lo haga repetir una danza las veces que sean necesarias para dejarla a punto para la presentación, eso es muy bravo. Argiro acompañó la exposición con pequeñas interpretaciones de piezas musicales que ilustraban su explicación, desafortunadamente, no las pudimos incluir ya que no fue posible recuperarlas de la grabación original.
Del Pasillo al Baile Bravo
Por: Argiro Ochoa
Vamos a hablar de una expresión netamente antioqueña que hasta ahora ha estado metida dentro de todo el bagaje musical del departamento de Antioquia y que de pronto lo hemos tratado mal en cierta forma cuando por desconocimiento lo hemos tratado con términos peyorativo como: música Guasca, música Parrandera, aunque el término de música Parrandera, es muy adecuado porque es música de baile y se ha utilizado como música para bailar.
Para las personas que trabajamos en el difícil empeño recuperar la tradición y la identidad de nuestro país y sobre todo de nuestro departamento ya tenemos claramente definido parte de los sentimientos nacionales; es así como al escuchar por ejemplo una Cumbia nuestro pensamiento se traslada a la costa norte de Colombia, pero si es un Joropo nuestro sentir se sitúa en los Llanos orientales de nuestro país, así sucede igualmente cuando escuchamos una Guabina, un Sanjuanero, etc. Nuestra mente coloca al lado de cada uno de estos aires, una región determinada que es reconocida a nivel coreo musical por estos elementos culturales colombianos.
Para nosotros como antioqueños siempre nos ha “acosado” una pregunta ¿y a Antioquia que la identifica? ¿Cuál es el ritmo que al escucharlo nuestra razón le coloca al frente, el nombre de Antioquia? ¿O será que Antioquia no tiene identidad? Estas inquietudes nos han llevado por más de 30 años a pensar que pensar, escudriñar y escuchar atentamente para reunir elementos relacionados con el aire que siempre hemos interpretado y que en lugar de analizarlo y sobre todo sentirlo le hemos adjudicado el nombre de los bailes que ejecutamos con él, haciéndolo pasar completamente desapercibido gracias a nuestro automatismo interpretativo y o nuestra desidia sentimental por lo nuestro.
El objetivo pues de este trabajo es recuperar para bien de nuestra cultura paisa y de Colombia un ritmo que ha adoptado todos los nombres de otros ritmos parecidos pero que siempre suena y se siente diferente, aunque se disfrace de otra manera. El problema con nuestro Baile Bravo es que siempre lo hemos llamado Merengue, Parranda, Son Paisa, lo hemos llamado hasta Currulao, siempre le hemos puesto el nombre de otros ritmos que se parezcan, nunca el verdadero nombre del ritmo.
Presentamos entonces a ustedes el Baile Bravo, hermano derivado del Pasillo; aquí hay que hacer una aclaracioncita y es que nosotros nos gastamos todo el tiempo del mundo para sustentar que lo nuestro no es de nosotros. Si vamos a hablar del Pasillo gastamos horas y horas para decir que eso viene del Vals, si vamos a hablar del Bambuco nos gastamos horas y horas para decir que eso viene del África, de los indígenas, no sé qué, nunca para decir que eso es nuestro. Lo mismo sucede con el Baile Bravo lo hemos interpretado toda la vida, pero nunca lo hemos llamado por su verdadero nombre ni hemos dicho a quién pertenece ese ritmo de Baile Bravo.
Hermano derivado del Pasillo y amo y señor de lo que era y porque no, sigue siendo todavía la fiesta popular campesina en Antioquia.
A través del tiempo hemos aceptado de pronto entre comillas de que el Pasillo se deriva del Vals europeo y aceptamos que de ese Vals surgió un Pasillo lento, de ese Pasillo lento se convirtió en un Pasillo mucho más rápido y surge entonces el Baile Bravo. Es necesario aclarar que este Pasillo que estamos hablando se refiere a la parte coreográfica.
El Pasillo lento, el Pasillo Fiestero y el Baile Bravo así como también se refiere a la parte musical, solamente que la diferencia entre el Pasillo Lento y el Pasillo Fiestero, solamente musicalmente no es sino la velocidad.

Es importante anotar aquí que el aprendizaje musical en el medio campesino siempre fue y sigue siendo empírico o de oído o de “oídas” como dicen por ahí. Lo que se enseña, lo que sale de un campesino a otro sale tarariado y el otro coge su instrumento y asimila lo que le tarariaron, se muestra con algunas indicaciones, el alumno capta y aprende a su manera, dando a esto lugar a seguras desfiguraciones, este término hace rato que no nos está gustando, más bien el de variaciones, porque musicalmente no se desfigura, musicalmente se agrega otra cosa y surge una cosa nueva, que va repitiendo de acuerdo al número de veces que se da esta variación, esto es lo que se llama tradición oral.
Al hablar pues del Baile Bravo es necesario remontarnos a la época en que aparece el tiple. Cuando aparece el tiple en nuestro medio hay una especie de revolución musical sobre todo para el campesino que aprovecha el tiple de una manera espectacular y se convierte el tiple en una herramienta musical para todo lo que se utiliza musicalmente. Con el tiple se baila, se canta, se dan serenatas, se hace de todo, inclusive encontramos dentro del medio campesino tipleros “finos” lo que ahora llamamos en el medio académico “tiplistas” es muy diciente como la academia va transformando las cosas, entonces lo que era un “tiplero fino” en las veredas se convierte en un “tiplista”. Ese manejo del tiple que hace una armonía y al mismo tiempo una melodía acompañante ahora se le dice concierto de tiple. El triple aparece a mediados del siglo XIX y se asienta como acompañante de la bandola, se llena un espacio muy grande porque la bandola es un instrumento melódico, la guitarra es la que hace los bajos y aunque también es melódica en ciertos aspectos y armónica, llega el triple y llena todo este vacío y en las manos del campesino se convierte en la herramienta más eficaz para amenizar las tertulias y hacer los bailes que siempre nos han identificado hasta ahora, sólo que no nos hemos dado cuenta. Por las características armónicas y ante la falta de compañeros con instrumentos melódicos el campesino “tiplero fino” se acomoda con su capacidad interpretativa y va incluyendo dentro del “surrunguiar” una incipiente pero perceptible melodía que va identificando cada pieza que toca, eso fue muy común con las danzas que ahora interpretamos. Cuando el tiple iba a interpretar las vueltas por ejemplo uno distingue una melodía que iba haciendo el tiplero y era el mero tiple lo demás era un taburete, una guacharaca y de pronto un par de cucharas, pero si al tiplero le decían toque el Gallinazo, entonces él hacía otra melodía, pero el surrungueo del tiple era exactamente igual y si le decían toque la contradanza, entonces él hacía otra melodía pero el ritmo se conservaba tal cual y la orquesta siempre era con tiple, un taburete o un tambor, las cucharas y la guacharaca y con esta orquesta se bailaba en el campo desde las 6:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana del otro día, simplemente se repetían las mismas melodías y muchas veces se tocaban las Vueltas y se bailaba las Vueltas, pero con eso se podía bailar otra cosa, entonces no se requería tener el repertorio muy extenso para amenizar una fiesta de amanecida.
Vamos a ver entonces la diferencia que hay entre la forma de tocar el Pasillo con el tiple y la forma de tocar el Baile Bravo. Para los que entendemos un poquito de música en un compás de ¾ está identificado por seis corcheas, esas seis corcheas se utilizan en el tiple para hacer seis rasgueos con una característica muy importante para el Pasillo, el primer rasgueo se hace hacia abajo, segundo hacia arriba y el tercer rasgueo como un apagado y se le dice aplatillado, entonces: baja, sube aplatillado, sube, baja aplatillado, eso da una característica muy concreta que suena así (demostración).
Ahora el Baile Bravo, el campesino coge las 2 primeras corcheas y las convierte en una sola y todo lo demás se conserva igual entonces, él hace un rasgueo largo aplatillado y lo demás es Pasillo. Para un buen oidor esto ya no es Pasillo, aunque en algunas conversaciones con académicos de pronto se dijo: ¡ah eso es un Pasillo montañero! y de pronto hay razón porque al ritmo de Baile Bravo están etiquetados como Pasillo y lo hemos visto en el Festival del Pasillo en Aguadas los niños salen a bailar un Pasillo Fiestero y lo que bailan es “Baile Bravo”.

Ésa ligera diferencia de juntar dos corcheas en una negra le da esa característica completamente distinta a lo que suena como un Pasillo académicamente y el montañero cuando toca Pasillo también lo toca igualito, sólo que cuando toca el otro baile ya no toca Pasillo sino el ritmo que le corresponde. Se podría observar que al hacer el Baile Bravo de una manera rápida es confundible con el ritmo del Pasillo pero eso sería para una persona completamente lega en la materia pues el sólo sonido del tiple se nota un sabor diferente, este susurrungueo, está catalogado como una onomatopeya con la cual nos hemos identificado y que se ha definido para el campesino como: churunguischunguis o turrumbistumbis. Surrunguiar el tiple es entonces sacar ese churunguischunguis y si ustedes le van a adaptar al ritmo del pasillo ese turrumbistumbis no encaja y cuando quieran hacen la prueba ustedes tocan con Pasillo y tratan de decir churunguischunguis y no, eso sólo da con Baile Bravo.
Con este ritmo se bailaron inicialmente en el campo las Vueltas, el Gallinazo, el Capitusé, la Redova, bailes denominados Bravos, aquí es donde empieza el meollo del asunto; esos bailes se denominaban bravos por la resistencia física que se necesitaba para su interpretación y de donde indudablemente tenía el nombre. En el Colombiano del día 21 de diciembre de 1997 apareció una explicación sobre esto, hecha por la familia Cadavid de la vereda de San Andrés del municipio de Girardota y que textualmente dice: “hace poco se inició en la vereda gracias a la familia Cadavid integrantes de Aires del campo un proceso de recuperación folclórica, allí se encontraron los ritmos bravos que eran bailes que hacían desmayar a las parejas por su efusividad, entonces aquí hablan de los ritmos bravos pero dicen que eran bailes, aquí mismo, Gustavo López, un profesor de la Escuela Popular de Arte de Medellín en una ponencia sobre músicas antioqueñas del Valle de Aburrá presentaba en el Quinto Taller Latinoamericano de Música Popular en Bogotá en 1988 dice textualmente: “tonadas antiguas o bailes bravos son ellos: Las Vueltas, La Caña, Los Monos, Guabina, El Sapo, Gallinazo entre otros” aquí es necesario aclarar que esa Guabina de la que él habla ahí no es la Guabina que conocemos comúnmente dentro de la música andina colombiana. Como se puede ver a través de la tradición coreo-musical de Antioquia, aparece el nombre de Baile Bravo o ritmo bravo siempre asociado a la danza que se interpreta y no al ritmo que lo acompaña, tal vez esta sea la razón por la cual en festivales tan importantes para la música andina colombiana como el Mono Nuñez, Antioquia le canta a Colombia y aún aquí en el de COTRAFA, aunque entre otros aparece como ritmos de la zona andina de Colombia, Las vueltas y La Redova sin percatarse que éstas son danzas que se basan en un mismo ritmo denominado Baile Bravo, si ustedes cogen las bases del Mono Núñez o las de COTRAFA o las de Antioquia le canta Colombia ustedes van a ver que en esas bases dicen: ritmos que se aceptan para los músicos y empiezan… Bambuco, Pasillo, Guabina, Torbellino y por allá a la último dice Vueltas Antioqueñas y Redova. Y no es que no les hayamos dicho, hemos enviado cartas a Funmúsica del Valle del Cauca, a Funmúsica de Medellín, hemos enviado cartas Antioquia le canta Colombia, hemos enviado cartas a toda parte, más sin embargo no se cambian, ustedes cogen las bases de este año y ahí están: Vueltas y Redova y ní las Vueltas ni la Redova son aires, son ritmos, son danzas que se bailan con el ritmo de Baile Bravo. Don José Gilberto Bañól un músico investigador perteneciente al grupo de danzas Ingrumá, en calidad de director del grupo musical dice él que en el Cauca este aire se conoce como Pasillo Bravo y toma este nombre porque en danza el objetivo de las parejas es la de hacer reír al otro, pero este no se ríe, de ahí que por eso se llama Pasillo Bravo.
En alguna oportunidad yo le preguntaba a María Eugenia Yarce en una conversación con ella precisamente sobre… Y ella era la que me decía que eso era Pasillo guachapandiao, de pronto el guachapandiao lo utilizamos nosotros para decir que es un pasillo brusco, hecho como a la brava, de pronto puede haber una relación con lo guachapandiao, otros lo llaman Son Paisa hemos tratado de averiguar por qué lo de Son Paisa, resulta que el son pues es aire cubano, pero también le decimos son a un ritmo cualquiera, entonces… “ Al son que me toquen bailo” es decir, al ritmo que me toquen bailo, esto de Son Paisa puede ser porque alguien se le ocurrió decir: que este ritmo es un ritmo paisa. Muy resaltable es de que la trova en su estilo original, es decir como la hacían Ñito Restrepo y Salvo Ruiz y que esa fue la primera forma como se hizo el primer Festival de la trova en Antioquia, antes de constituirse Astrocol la trova se hacía y todavía la hacen solamente que ya en aras de la modernización, en aras de muchas cosas ya la trova contiene muchos otros elementos que anteriormente no tenían, pero se hacía con el ritmo del baile bravo de una manera ¿? podemos colocar aquí el ejemplo del Merengue boyacense que no tiene ninguna diferencia con el Baile Bravo nuestro; no nos vamos tampoco a meter en una polémica con los boyacenses y en el Tolima está la Rumba Criolla que es exactamente el ritmo del Baile Bravo y de pronto tendríamos argumentos para decirle a los tolimenses eso se lo llevó el señor que llevó la rumba criolla se los llevó de Antioquia pero tampoco es la idea ponernos en esa polémica, la diferencia entre el Baile Bravo y la Rumba Criolla es la manera de tocar el tiple (demostración)… Es la manera como ellos vuelan la mano pero el ritmo es exactamente igual pero no vamos a pelear con los tolimenses tampoco.
Entonces volvamos a diferenciar el Pasillo del Baile Bravo (demostración).
Ahora entramos a la parte que nos es más clara a todos; después de ser la tonada base de la gran mayoría de nuestros bailes tradicionales y ser animador de bailes y fiestas familiares, nuestro Baile Bravo y más que todo sus intérpretes musicales se vuelven atrevidos y lo sacan del medio campesino; se comienza a escuchar entonces en grabaciones que reflejan el sentir de nuestros montañeros, su lenguaje, su picaresca y su manera de ver la vida es así como aparece entonces para hablar de los más conocidos y populares, el Grillo de Antonio Posada, Métale Candela al monte de los Hermanos Giraldo, lo desentonante de todo esto es que nuestros ritmos no aparecen en las grabaciones pues como siempre estuvo ligado a la danza, al hacerlo ya para el comercio se le asimila cualquier otro ritmo que se le parezca y entonces encontramos Baile Bravo con el nombre de Bullerengue, Parranda y hasta Currulao. Más delante en la década del 50 aparecen las que finalmente irían a revolucionar este ritmo con su manera muy particular de interpretación y que llegaron al municipio de Bello, desde el municipio de Frontino se dedicaron a hacer y a grabar música que sobre todo en la época de diciembre fue ingrediente primordial para amenizar las fiestas, estos personajes son los hermanos José, Joaquín y Agustín Bedoya, después aparecieron Miguel Montoya el famoso “Ratón”, Jorge Gámez y Abelardo Montoya entre otros; de esta época se denominó a esta manera de hacer música bailable como música Parrandera, música Guasca etc. Lo cierto es que la picaresca de la trova, la sátira del sainete y el ritmo del Baile Bravo se conjugan en este género de música para darle escape al sentir del pueblo campesino que lo encuentra como una forma de llamar la atención y denunciar hechos y sucesos medio en serio y medio en bromas. Ya más reciente en 1977 aparecen los hermanos Germán y Rigoberto Muñoz intérpretes de la bandola y el tiple respectivamente, quienes secundados por Miguel Ángel Noire director artístico de discos Victoria, en la guitarra y el mismo Joaquín Bedoya en la guacharaca conformaron el Grupo Occidente para grabar en varios LP todo un repertorio tradicional para bandola tiple y guitarra de la región de Antioquia y autoría de don Germán Muñoz. La gran mayoría de estas obras grabadas por el grupo tenía ritmos de Pasillo, Rumba y Baile Bravo aunque estos dos últimos no aparecen por parte alguna al ser reemplazados por los nombres de Parranda, Porro, Merengue, etc. es rescatable el hecho de que este género bailable del Baile Bravo para la época de navidad se escucha en gran parte del territorio nacional y hoy día tiene una gran variedad de intérpretes que lo hacen ritmo conocido a nivel nacional pero su verdadero nombre es ignorado, su origen e identidad. Es importante aclarar que en la época en que llegan los Bedoya a Bello, habrían salido algunos aires como El Grillo, Échale candela al monte, pero la gente como que no le paraba muchas bolas, con los hermanos Bedoya sucedió ya toda una revolución y se dio un gran inicio desde aquí del municipio de Bello a la música Parrandera Paisa, se regó por todo el país, podemos decir que en ninguna parte de Colombia no se oye esa música Parrandera, pero no aparece por ninguna parte Baile Bravo.
Solamente ahora en los últimos años se han atrevido a ponerle el nombre de Baile Bravo a algunas obras, entonces las disqueras cogían estos números y como estaban en su época Buitrago Toño Peñaranda y su Conjunto, todos de la costa y la Parranda es un aire costeño entonces los disqueros oían estos ritmos y lo ponían: Parranda, Merengue o lo ponían como vamos a ver ahorita Currulao y entonces vamos a seguir escuchando otras muestras de lo que ha sido el Baile Bravo en nuestro medio.
Escuchemos un pedacito del Grillo y lo vamos imaginando con lo que ya hemos podido escuchar aquí del tiple (demostración) ahora vamos a escuchar “Métale candela al monte” que aparece etiquetado como Currulao (demostración) ahora vamos a escuchar la obra de Rafael Valencia que se llama “Quisiera ser el diablo” que aparece etiquetado como Pasillo Fiestero y lo más grave de eso no es que aparezca etiquetado así… “El que no sabe, no sabe” entonces en Aguadas a los niños de las escuelas los ponen a bailar Quisiera ser el diablo y los montan en el escenario de la plaza diciendo que van a bailar Pasillo Fiestero porque eso es lo que dice en el disco.
Ahora vamos a escuchar dos pedacitos de lo que en realidad es el Baile Bravo para nosotros los antioqueños y sobre todo para los que estamos metidos en el cuento de ver cómo es la tradición antioqueña. Estos dos pedacitos son: el primero de una obra que se llama “Moviéndolo” de don Germán Muñoz interpreta el Grupo Occidente solamente que aparece como Parranda no aparece como Baile Bravo y el otro es “Uyuyuy”, aparece como Parranda y el autor es don Germán Muñoz interpreta el grupo Occidente (audición) escuchamos un pedacito de una obra de Luis Carlos Jaramillo, quien fue el primero que incursionó junto con Antonio Posada, claro que no le sonó la flauta, de los que incursionaron en este género de música hay una obra de él de la década del 50 que recalca muy bien el ritmo del Baile Bravo y luego escucharemos una publicidad hecha por los Marinillos en RCN ya sabemos quiénes son Reyes Nacionales de la trova que han representado a Antioquia etc. etc. donde ellos utilizan este mismo ritmo para hacer una publicidad que me llamó mucho la atención. Esto se llama “Las areperas” (audición) ahora vamos a escuchar algo muy simpático; aparece como Baile Bravo se llama El conejito y tiene la autoría de Gilberto Meza y Jesús Vanegas y fue grabado en 1976 por Agustín Bedoya, si ustedes observan estos señores cogieron la versión de “El conejo” o sea “La Marucha” que nosotros utilizamos para bailar las Vueltas Antioqueñas, ellos a lo ancho de la seda cogieron esa melodía para ellos, hicieron una obra y están cobrando regalías y a ninguno de nosotros que hacemos folclor antioqueño se nos ocurrió decirles ustedes porque cogieron eso pero… escuchémoslo (audición).
Vamos ahora a ver unas trovas pero estas no tienen la característica del que contesta con la última frase, el último verso que dice el otro sino simplemente que estas están hechas para hacer música de baile son hechas por Miguel Montoya y José Muñoz grabadas en 1979 y vemos como se hacía la trova en Antioquia (audición) ahora en autoría de Ricardo González aparece ya como Baile Bravo en 1991 y se llama “Pa entro y pa fuera” (audición) ahora un pedacito de “El animalito”, también aparece como Baile Bravo y es de autoría de Gilberto Meza y Raúl Vanegas grabado en 1971 y ya por último una curiosidad que llegó a nosotros casualmente pero queremos aclarar que esta curiosidad si ocasionó una carta para don Jorge Veloza y los Carrangueros, reclamándoles por haberse adueñado de esta melodía y que las cosas por el mero hecho de que son folklóricas o pertenecen al folclor no le da derecho a nadie para adueñarse de ellas y el muy honestamente en el Festival del Pasillo el año pasado (2008) cuando fueron a cantar esta obra aclararon que había sido tomada de la Redova del corregimiento de San Félix del municipio de Bello un trabajo de investigación de la Fundación Folklórica y Cultural Cosecheros de Antioquia. Entonces para terminar vamos a escuchar un Merengue Carranguero de Jorge Veloza que se llama La Pasilladora (audición).

Entonces este ritmo que hemos estado escuchando aquí es el ritmo con el cual los que hemos salido a los festivales los hemos llevado como Vueltas o Redova, como Gallinazos etc. y nunca decimos que ese ritmo se llama Baile Bravo y que es el ritmo que nos identifica ante Colombia y ante el mundo como antioqueño. Entonces el objetivo que Cosecheros de Antioquia pretende con este trabajo es que se coloque el Baile Bravo en el lugar que se merece de nuestro ritmo de la música andina colombiana al lado de Rajaleña, el Sanjuanero, del Torbellino etc. como identidad, como aire identidad de Antioquia. Si antes de hacer la muestra tienen alguna pregunta algún aporte, no somos los portadores de la verdad exclusiva somos portadores de lo que hemos vivenciado de lo que hemos averiguado, si hay más preguntas y las podemos contestar adelante porque no es obligación de uno saberlo todo.
Pregunta ineludible. Lo que se baile música Parrandera ahí se está bailando Baile Bravo, pero donde usted escuche música Parrandera en el Cauca o en cualquier departamento ahí se está haciendo a la manera de la región, se está haciendo Baile Bravo.
Pregunta de un asistente: entendemos, tenemos claro que ese aire con el cual se puede bailar la mayoría de las danzas de Antioquia, mi pregunta es ¿Si como baile existe que sea específico Baile Bravo?
Respuesta: en seguida lo vamos a mostrar. Baile Bravo es como el campesino baila esto sin referirse ni a Pasillo ni Rumba Criolla, ni a Merengue Carranguero, usted pone un Merengue de Jorge Veloza y el campesino lo baila como si fuera un Baile Bravo y tiene una manera, una actitud completamente diferente a la que tiene el Pasillo o a la que tienen Las Vueltas por ejemplo, porque es un baile popular, es un baile de fiesta y podríamos decir que no está catalogado como danza. Como baile, todas las danzas son bailes organizados, primero nace como baile, si tiene una forma de bailarlo tiene unos pasitos y nosotros le agregamos más pero es posible que más adelante cualquiera de ustedes en una fiesta campesina vea bailar eso y vea algunas figuras distintas porque es una cosa completamente libre y no está supeditado a una coreografía simplemente al regocijo popular de una fiesta.
¿Algo más?
Cosecheros parte a hacer demostración danzada de Vals, Pasillo Lento, Fiestero y Baile Bravo.
Interpretación Carlos Tapias
Para mi concepto (Carlos Tapias) podríamos concluir que el ritmo de Baile Bravo es aquel que se parece al Pasillo Fiestero y que sirve de acompañamiento, a varias melodías como Vueltas, Gallinazos, Redova, Guatín, etc, que son ritmos ternarios.
Dentro de la música Parrandera existen Merengues y Porros, pero se bailan o más bien se adaptan al Baile Bravo.
Este fenómeno, se repite en la actualidad con el “Porro marcado” que en realidad es una manera de bailar la música caribeña, porque de igual manera, se baila un Porro que una Gaita, una Cumbia, etc; hasta la Salsa la bailan con los mismos pasos y vueltas.
Finalmente, retomo el ejemplo citado por Argiro del tema “Quisiera ser el diablo” que los grupos de danza bailan como Pasillo, porque así aparece etiquetado en el disco, pero su ritmo es Baile Bravo y lo peor es que lo bailan con figuras del Pasillo académico. No se puede confundir el “churrumbis chumbis” con el Pasillo Fiestero.
Maestro Argiro de Jesús Ochoa
(q.e.p.d. / 1941 – 2010)

Artísta, gestor cultural, folclorista, bailarín, cantautor, poeta, escritor, investigador y administrador de Empresas de la Universidad Cooperativa de Colombia. Seis semestres de música en la Escuela Popular de Arte (EPA) de Medellín. Seis semestres de técnica vocal en la Academia de Hernán Montoya en Medellín.
Fue maestro de solfeo e interpretación de todos los instrumentos de cuerda y percusión para estudiantina colombiana, tambien de danza y expresión corporal de un sinnumero de folclorístas y artistas escénicos colombianos durante más de 40 años.
Integró o fundó los siguientes grupos artísticos:
Grupo de Danzas de Fabricato, Estudiantina de Fabricato, Estudiantina los Arrieros, Trío Olímpico, Trío Los Tártaro, Dueto Alma Criolla, Dueto Acuarimantina, Dueto Ochoa y Martínez, Instrumental Estudio Escuela EPA, Dueto Entre amigos, Grupo Vocal Voces de Serenata, Grupo Mixto Los Típicos, Grupo de Danza, Música Cosecheros de Antioquia Fundación Folclórica y Cultural.
Recibió los siguientes reconocimientos y premios:
En la danza folclórica:
- Alcaldía de Medellín - Antioquia por 30 años de Gestión Cultural y Artística (CRUZ DE PLATA) por la Divulgación del Folclor Antioqueño.
- Del Concejo Municipal y la Administración Municipal de Bello - Antioquia, por 40 años de vida artística en representación del municipio.
- De la Alcaldía de Cartagena - Bolivar, a toda una vida de trabajo cultural dancístico en beneficio de la identidad colombiana.
- Declaración del Alcalde de Ibagué - Tolima, reconociendo a Cosecheros de Antioquia como Patrimonio Cultural y Artístico de Colombia, en 1997
En la música:
- 1984. 2º puesto. El concurso nacional de interpretación musical “Anselmo de Durán Plazas”, en Neiva, Huila, con Los Típicos.
- 1986. 1º puesto. En el concurso de nacional de interpretación musical “Anselmo de Durán Plazas”, en Neiva, Huila, con Los Típicos”, habiéndoles entregado la Lira de Oro Sayco.
- 1990. 1º puesto. En el concurso de la canción “Marco Fidel Suárez” en Bello, Antioquia, con el dueto Alma criolla.
- 1990. 2º puesto. En el concurso “Antioquia le canta a Colombia”, en Medellín, Antioquia, con el dueto Alma criolla.
- 1992. Seleccionado como la Mejor Expresión Folclórica en la eliminatoria regional “Mono Núñez”, en Medellín, Antioquia, con el Dueto Alma Criolla.
- 1994. 1º puesto. En el Concurso Nacional “Mono Núñez”, con el Grupo Los Típicos, en Ginebra, Valle del Cauca.
- 1994. 1º puesto. En el Concurso Nacional del Pasillo Colombiano, con el Grupo Los Típicos, en Aguadas, Caldas.
- 1994. 1º puesto y Gran Premio “Luis Carlos González”, en el Concurso Nacional del Bambuco, con el Grupo Los Típicos, en Pereira, Risaralda.
- 1994. 2º puesto. En el Concurso “Luis Uribe Bueno”, en Medellín, Antioquia, con el Dueto Acuarimántima.
- 1994. 2º puesto. En el concurso “Antioquia le canta a Colombia”, en Medellín, Antioquia, con el dueto Acuarimántima.
- 1995. Condecorado con la Orden de la Democracia, por la Cámara de Representantes de la República de Colombia, por 29 años de vida artística y haber obtenido en 1944, el primer lugar en los tres festivales más importantes del país, con el Grupo Los Típicos.
1995. 1º puesto. En el concurso “Antioquia le canta a Colombia”, en Medellín, Antioquia, con el dueto Acuarimántima.
- 1995. 2º puesto. En el Concurso Nacional del Pasillo colombiano, en Aguadas, Caldas, con el Grupo Instrumental “Estudio-Escuela” de la Escuela Popular de Arte de Medellín.
- 1996. Premio a la Interpretación de una Canción Tradicional, en el Festival “Mono Núñez” con el Grupo Los Típicos, en Ginebra, Valle del Cauca.
- 1997. 1ºer puesto. En el Concurso “Antioquia le canta a Colombia”, en Medellín, Antioquia, con el Grupo Los Típicos.
- 1997. 1º puesto. En el Concurso Nacional del Pasillo Colombiano, en Aguadas, Caldas, con el grupo instrumental “Estudio-Escuela” de la Escuela popular de Arte de Medellín
Luz M Echeverry muchas gracias por leer la publicación y el comentario.
Un interesante análisis de las semejanzas y diferencias entre el baile bravo y sus analogos